RATAS CON TARAS

Amigas mías, por si no os ha quedado claro ya, en cualquiera de nuestros numerosos posts anti-ratas el príncipe azul u hombre perfecto NO EXISTE

En nuestro camino por encontrar “algo” que se asemeje un poco al príncipe o que se aleje lo suficiente de una rata inmunda repasaremos un sinfín de individuos a evitar.

1. El disperso: La rata dispersa es aquella que está pero parece que no está. Estos personajes se distraen con facilidad. Lo mismo estas en una cena romanticona con él que se va un momento al baño y cuando vuelve te dice que le ha llamado el Lusima “que se van a la fiesta de Charly que blabalbalbaa… tiene que despedirse a su vez del primo del vecino de…blabalbala, me voy”. El disperso. Este tipo en cuestión te hace lo que llamamos “la cobra cerebral”, en algún momento de la noche te hace entrever que piensa en ti, pero antes o después una se da cuenta de que tiene la misma prioridad que sus nuevas alfombrillas de coche o de la pobre mosca que pasa por la ventana. Nunca se sabe que esperar de estos tíos, lo único de lo que estamos seguras es que levantaréis la ceja una media de 56 veces por cita y pondréis ojos de conejillo perdido cada vez que os haga la púa, cosa que será muy a menudo. Una sabe como puede empezar la noche con estos maromos, nunca como va a terminar. Y NO, NO es exótico porque es “románticamente imprevisible”. Es más bien un grandísimo coñazo y un eterno dolor de cabeza.

Para que estos maromos espabilen hay que darles una mezcla de Valium combinado con Prozac (para contrarrestar los efectos) aparte de apagarle el móvil, romperle el ordenador, y.., importante, ponerle un embudo de esos de los perros en la cabeza para que eviten mirar a su alrededor y se dispersen de nuevo (y si es muy MUY disperso, pues le tintas el embudo de negro y listo.)

2. El pringado. Es aquel maromo que se cree que es alguien en tu vida importante y, en fin, NO LO ES. Estas almas en pena se intentan colar una y otra vez en tu vida buscando miserablemente un hueco donde meterse. El día que le rozas el hombro de soslayo llamarán esa misma noche a su madre para comentarle quedar para que conozca a su nueva “mujer de su vida”. Estos seres pasan de manera completamente inadvertida a nuestros ojos mientras que nosotras seremos el centro de atención constante para ellos, su culebrón diario sin el que no sabrán como vivir al día siguiente. Lo mejor con estos tipos; volverles locos.

Haceos cómplices de estas tristes ratas y cada día os inventáis una perla cada vez más grande para acojonarles. Esto es, una tarde le confiesas que en realidad siempre te habías sentido atraída por las mujeres, pero que necesitas su semen para sentirte realizada como persona y ser madre, o que en realidad siempre te había gusta su abuela en secreto… o algo así de absurdo. Con un poco de suerte con el tiempo y varios dolores de cabeza os dejará en paz.

3. El perroflauta: El típico tío antisistema que te va comiendo el coco sin habértelo merecido tú. Un personaje con el que da absolutamente igual de lo que hables que siempre te saldrá con la misma frasecita de turno de “eso es culpa del gobierno (a rellenar según el año), que nos engaña y nos manipula!!”. Con “suerte” te presentará a sus amigos perroflautas y todos juntitos te intentarán convencer para que te unas a ellos a una manifestación anti-pro-para-sindicalista en contra del mundo en general. Les da igual si estás de acuerdo o no, el caso es quejarse CONTÍNUAMENTE de cada movimiento de cualquier persona en traje que salga por la tele, lo que les da pie para juntarse varios y hacer pancartas super originales en las que pongan todas estas palabras: comunismo, derechos, fascismo, gobierno, libertad.., etc y luego otras como: no, basta ya, stop..etc…Zzzzzz….. Se les caracteriza por tener el pelo corto por delante y rastas a la altura de la nuca, barba de 3 semanas, palestina en el cuello aunque hagan 45ºC a la sombra, pantalones “cagaos”, zapatillas zarrapastrosas o sandalias en invierno a -15ºC.

Para librarte de estos tios-pereza sólo menciónale que tu tercer apellido es Mussolini o algo así. El resultado es instantáneo.

4. El pijus magnificus: El típico niño pijo de turno de “que guapo soy, que tipo tengo”. Estas ratas inmundas se hacen pajas con solo mirarse al espejo. Son una especie de Ken y les hace falta a Barbie, es decir, tú. Conclusión, vas a ser un accesorio al igual que su chalet en Baqueira o el BMW que les ha comprado su padre “por sus notas”. Te paseará por lo que él llama “círculo de amistades” mientras te rodea con sus brazos por la cintura, como si fuera un puto pescador recibiendo el premio con un el último lenguado de 60kgs que ha pescado con una posterior ovación de los descerebrados de sus amigotes. Serás una novia de eventos, como la Presley; de bodas, bautizos y comuniones. Y tendrás que estrujarte al máximo la cabeza para ser la mejor vestida de sus fiestas, porque sino tendéis peligro de que le meta mano a alguna de las retrasadas de sus amigas con botox.

Forma de huir de estos maromos: preséntate en la boda de su primo (que tanto estaba esperando) en el chándal zarrapastroso que alguien usa en el pueblo de tu madre para desatascar las pozas… con un poquito de maldad y mucho estómago revolcaos previamente en una charca. Eso si, poneos unos buenos tacones también; informal pero con estilo.

5. El anti-compromiso: Es el tío que pase lo que pase con él (pasándolo bien, pasándolo mal, riéndote, discutiendo, comentando.., lo que sea) te va a dejar claro QUE NO QUIERE NADA SERIO CONTGO. En serio, ¿Qué mierdas les pasa a esos tíos? Ya puedes haber tenido 2 citas, que 34 que SIEMPRE lo van a dejar caer por algún lado. Eso amigas mías, el es grandísimo miedo al compromiso que tienen esas ratillas o en su defecto a reconocer que los muy idiotas sienten algo por ti. NO dejan de ser meras ratillas.

La primera cita ya te lo dejarán clarísimo “oye mira, que me caes guay y tal, pero que no quiero nada serio eh??, pero de buen rollo eh??” Pero vamos a ver retrasados, las mujeres no esperamos tomar decisiones serias las primeras 4 horas de convivencia en un puto VIPS, ¿Por qué destrozar el momento creyéndose el más macho de todos los hombre machos soltando esa perla? Lo peor de estos personajes es que probablemente sigan “a gusto”, como dicen ellos, las siguientes 25 citas pero venderían a su madre antes de reconocer que no les importaría tener novia.

Se dan casos de citas que con los años terminan en boda pero los muy masculinos, acercándose al altar con la “no-novia” de turno dicen algo así como “si, si quiero… pero como amigos eh???”

Con estos elementos lo mejor que podéis hacer es enrollaros con todo bicho viviente y luego contarle todas tus experiencias a la rata como el día “que te llegaste a poner el tobillo detrás de la nuca con el ruso aquel dotadísimo”..y terminas la frase con algo así como “oye, yo esto te lo cuento porque SÉ que eres mi amigo..(ya me lo dejas clarito TODOS LOS PUTOS DÍAS”)

Idiotas.

Reina de Corazones